La música de Zuco 103 es una mezcla de todo lo que existe, bossa-nova, samba, drum’n’bass, hiphop, funk o el dub. Dejando atrás todas sus influencias, el grupo descubre continuamente nuevos sonidos. Su música surge del encuentro entre tres personalidades: Stefan Kruger, batería holandés de formación heterodoxa; Stefan Schmid, teclista alemán que procede de la escena jazzística de Munich y de Amsterdam; y la cantante brasileña Lilian Vieira, poseedora de una voz sugestiva, sensual y difícil. Los tres artistas trabajaron juntos por primera vez para realizar una serie de temas para el grupo electro jazzístico holandés SfeQ. Entusiasmados con los resultados, decidieron formar Zuco 103. El nombre viene de la palabra portuguesa “suco” (zumo), y, según Lilian Vieira: “Zuco 103 es un cocktail con un 103% de energía e inspiración”. El show inicial de Zuco en París, dentro del Festival Transmusicales, fascinó al público llevando a la revista francesa Les Inrockuptibles a proclamar el disco debut del grupo, “Outro Lado”, como uno de los más seductores del año. Este primer trabajo también ha sido definido por los expertos como una fantástica exploración del arte del samba y bossa, enriquecido con la sensualidad del funk sobre las bases techno y drum’n’bass, todo ello tocado con un minimalismo ascético y un total perfeccionismo que Zuco 103 consigue reflejar muy bien en las actuaciones en directo. Los distintos background y formación musical de los componentes de Zuco 103 han sido motivo para profundizar todavía más en sus diferencias y crear una música que conecte con todo el mundo. Haciendo uso de la tecnología mezclan sonidos y ritmos de Brasil o Cuba con el funk, el dub y otras músicas de baile hasta lograr una de las más excitantes mezclas entre la música electrónica y la brasileña. Stefan Kruger, Stefan Schmid y Lilian Vieira continúan trasngrediendo los límites musicales en su segundo álbum, “Tales of high fever”, donde dejan volar su inspiración proveniente de los ritmos y melodías de la música tradicional brasileña (samba, bossa y ritmos nordestinos), el R’n’B, la música electrónica, el jazz, funk, pop y los ritmos africanos, para ser al mismo tiempo sofisticasdos y explosivos, bailables y también sedosos y violentos, innovadores y pegadizos…